Peritaje arquitectónico en los nuevos Encants

Pocos días antes de su inauguración, los Encants de Barcelona hizo aguas, ya que las lluvias causaron una gran gotera en el tejado de este mercado donde se acabó produciendo una enorme cascada de quince metros.

Así pues, una obra que había costado 52 millones de euros, tuvo que esperar unas semanas más en abrir sus puertas, previstas para el 21 de junio. Pero este no fue el gran problema, la inundación se produjo el 8 de junio, es decir, pocos días antes de la inauguración, por lo que el perjuicio para los comerciantes fue considerable, ya que se les estropeó buena parte de la mercancía que ya habían empezado a trasladar a este recinto. Además con tan mala suerte, que una de las partes afectadas fue, precisamente, la del almacén.

Días más tarde, el propio Ayuntamiento reconoció que la estructura de la cubierta del mercado estaba mal diseñada, ya que se construyó pensando en lluvias no superiores de 160 litros por metro cuadrado hora y el día de la inundación se registraron 180.

El consistorio también encargó un peritaje externo al Instituto de Dinámica Fluvial e Ingeniería Hidrológica Flumen de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC). Este concluyó que había deficiencias en el sistema del drenaje, por lo que proponía poner en la cubierta nuevos dispositivos de captación de agua. Los trabajos de rediseño del recinto se valoraron en 240.000 euros que los asumió la constructora. Y aunque por suerte la intensa cascada no se produjo cuando el mercado ya estaba al cien por cien en marcha, sí que es un error que se corrigió a destiempo porque causó daño en los materiales de los comerciantes y se detectó cuando la obra estaba prácticamente finalizada.