Las denuncias falsas constituyen un delito

Una denuncia falsa, es aquella denuncia en la que los hechos no son verdaderos o no coinciden con la realidad, y por lo tanto, según el artículo 457 del código penal, constituye un delito por sí misma.

Estas simulaciones generan un gasto «extraordinario» para la Administración, que destina personal y medios para trabajar en casos que en realidad no se han producido.

Para evitar estos falsos delitos, la Comisaría Provincial ha elaborado un estudio sobre el coste que suponen estas investigaciones. Las primeras estimaciones apuntan a que, como mínimo, rondaría los 800 euros en los asuntos más sencillos,  aunque el coste varía dependiendo del tipo de delito inventado.

Además de la sanción económica, también puede haber prisión para quién invente un delito (entre seis meses y tres años).

Algunos de los hechos delictivos inventados que se denuncian ante la administración son: robos con violencia, hurtos, falsos despidos, secuestros e incluso la muerte.

La mayoría de estas denuncias presentadas buscan cobrar un seguro. Aunque, según lo que acabamos de ver, intentar ahorrar unos euros o querer ganarlos, puede salir mucho más caro.